02 abril 2006

Reiniciando

De lo que se da cuenta uno cuando maneja un imperio es de que no hay amigos. El griego y yo íbamos a acabar mal, ya fuese por su culpa o por la mía. Así que preparé un plan, para recortarle la ventaja que me sacaba el hindú había que conquistar a alguien, y aprovechando el derecho de paso que teníamos firmado Alejandro y yo empecé a colocar unidades militares al lado de sus ciudades, para declararle la guerra y llevarme cuatro ciudades en un turno. Sí, es una traición como una casa, pero que le vamos a hacer, o él o yo.

Cuando tenía casi todo preparado me declararon la guerra el malí y el hindú, a la vez. Por el malí no había problema porque me venía con elefantes y yo ya tenía infantería. El problema era el hindú que se me presentó con artillería y tanques y claro, cualquiera le dice nada. Total, que se acabó la partida y decidí salir a emborracharme.

He llegado a casa a las 7 de la mañana, después de pulirme la mitad de la pasta que tengo para pasar el mes, de que me invitasen a dos copas, de pasarme unas risas viendo el "buitreo" de los chavales en las discotecas y de acercar posturas con aquella camarera. Ayer la pedí una copa diciendola que si no me emborracho no me atrevo a tirarla los trastos, y un poco más y se desborda el whisky ante el asombro de los presentes. Si veo que durante la semana santa termino mi gran pastel académico lo mismo la llamo para quedar y que me conozca como persona y no como borracho, y demostrarla que puedo beber cosas que no lleven alcohol.

En fin, que como hoy no tengo la cabeza para ponerme a colocar guindas en la tarta he comenzado otra partida al Civilization. Esta vez me he cogido a los alemanes, encabezados por Bismarck, que es diligente y comunicativo. Me volcaron el budismo y el hinduismo, así que tuve que tomar una decisión rápida y lo hice, fundé el judaismo. Tengo un imperio alemán judío. En cuanto descubra el fascismo y saque los tanques le cambio el nombre a mi país y lo llamo Israel.

Siguiendo en mi línea volví a construir el Partenón y los Jardines Colgantes, esta vez en Munich. Hice tambíen el Oráculo en Berlín, con lo que me regalaron una tecnología. He vuelto a caer en la crisis económica pero esta vez ha sido más controlado, y no he perdido comba respecto a los demás. El egipcio, el hindú y el francés están muy fuertes, y casualmente al hindú lo tengo al oeste y al egipcio al sur. Le he untado al ruso para que le hiciese la guerra al egipcio y darme así un margen para prepararme para pegarle, porque le veía venir con muy malas pulgas.

De buenas a primeras ha venido Isabel a pegarme, advirtiéndome que estaba harta de mi soberbia. No lo termino de entender ya que España está a tomar por culo y no hemos hablado en toda la partida. Lo cachondo es que me viene a pegar con guerreros y carros, cuando yo ya tengo saeteros y estoy a punto de descubrir la pólvora. Seguiré defendiéndome hasta que la mujer se canse y se dedique a otra cosa.

En breve sacaré a pasear a la caballería a ver si le cojo 4 ciudades al egipcio y 3 al hindú. Con esta guerra preventiva espero cortarles las alas y que la partida se decida entre el francés y yo. Hay una ciudad bárbara al lado del egipcio, que no se si la han fundado los bárbaros o que se la han quitado. Lo de los bárbaros merece mención aparte, increíble la cantidad de ataques que me han hecho esta partida.

En fin, espero que esta vez nadie saque los tanques antes que yo y poder así extender por el mundo las bondades de una alemania fascista y judía.

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