25 enero 2007

Génesis 38

Este es uno de los capítulos más divertidos del antiguo testamento. Trata de una parte de la vida de Judá, que era hijo de Jacob. Fue uno de los patriarcas de las doce tribus judías y su nombre significa algo así como Agradezco a Dios.

En el capítulo anterior Judá acababa de vender a su hermano a los egipcios, en concreto a un eunuco llamado Potiphar, y para quitarse el marrón de encima le dijo a su padre Jacob que había sido devorado por una bestia.

[Génesis 37:26-27] – "Entonces Judá dijo a sus hermanos: ¿Qué provecho el que matemos a nuestro hermano y encubramos su muerte? Venid, y vendámosle a los Ismaelitas".

Para hacer tiempo mientras se capeaba el temporal se bajó a ver a un Adullamita llamado Hira. Allí conoció a una moza cananea con la que tuvo tres hijos: Er, Onán y Sela. A Er le casó con una mujer llamada Thamar, pero como la trató con dignidad y respeto Jehová decidió que Er era un mal hombre y se lo cepilló. A Judá no le parecía bien quedarse sin nietos, y además la familia es el pilar fundamental de cualquier mafia tribal, así que obligó a Onán a que la preñase. Thamar, como mujer sufridora de una sociedad patriarcal, no tenía ni voz ni voto en este aspecto.

Onán, que era un tío con escrúpulos y que para ahorrarse en regalos de cumpleaños no quería que sus hijos fuesen además sus sobrinos, inventó la técnica anticonceptiva "marcha atrás".

[Génesis 38:9] – "...sucedía que cuando entraba a la mujer de su hermano vertía en tierra".

Esto a Jehová también le pareció mal así que se lo cepilló igualmente. A Judá se le estaban terminando los efectivos y a Sela sus gónadas todavía no le vertían hormonas en el cuerpo, así que le dijo a Thamar que esperase sentada ya que algún día mandaría a su niño a que terminase el trabajo.

Thamar un día se quitó la ropa de viuda y se puso un velo. Judá pasó por allí y la confundió con una ramera, y como buen patriarca y jefe del chiringuito la dijo que quería entrar en ella. A Thamar se le encendió una luz, toda la vida se la habían zumbado de gratis y sin preguntar, por fin tenía la posibilidad de sacar algo en claro. Le pidió a Judá que le diese su anillo, su manto y su bordón como prenda hasta que le mandase un cabrito. A Judá no le pareció mal ya que estaba más salido que el cerrojo de un penal. Thamar por fin se quedó embarazada.

Al tiempo el embarazo de su nuera comenzó a ser evidente y Judá se mosqueó porque pensó que había fornicado con cualquiera, así que mandó a sus sicarios a que la quemasen viva. Mientras la llevaban a la pira la chica sacó las prendas del jefe alegando que el padre era él. Judá no tuvo huevos a quemar a la chica después de haberla preñado, y la desterró de la familia.

Lecciones aprendidas en este capítulo de la Biblia:
  • A Jehová no le importa que estés casado y te vayas de putas.

  • No obstante, a Jehová le parece bien que mates a las mujeres que se acuestan con personas que no son sus maridos.

  • A Jehová tampoco le parece mal que vendas a tu hermano como esclavo al enemigo.

  • Jehová no soporta que uses métodos anticonceptivos para planificar los gastos familiares.

2 comentarios:

Ros dijo...

me he quedao muelta!!!!!!!!!

uy como me encuentre con jehová al final del tunel la que le espera...

Anónimo dijo...

ONAN RULES!